¿Por qué los mosquitos del dengue son cada vez más resistentes a los insecticidas?
Científicos argentinos del Conicet identificaron una mutación genética en el Aedes aegypti que lo hace hasta 10 veces más resistente a los insecticidas. Este descubrimiento plantea nuevos desafíos en la lucha contra el dengue.
Laura Harburguer (izq.) y Paula Gonzalez, investigadoras del CONICET y autoras principales del trabajo (Conicet)
El mosquito Aedes aegypti, transmisor del virus del dengue, ha desarrollado una resistencia significativa a los insecticidas utilizados comúnmente, como la permetrina. Un estudio realizado por científicos argentinos del Conicet, en colaboración con la Fundación Mundo Sano y el Instituto Oswaldo Cruz en Brasil, ha identificado una mutación genética, V410L, que le otorga a este mosquito una resistencia hasta 10 veces mayor a los piretroides, el grupo de insecticidas más utilizados para su control.
Argentina ha registrado un récord de casos de dengue durante la temporada 2023-2024, con 583.297 casos confirmados y 419 fallecidos, cifras sin precedentes en la historia del país. Esta situación refleja una tendencia similar en América Latina, donde el dengue continúa propagándose a un ritmo alarmante.
Evidencia de resistencia en diferentes regiones
Los científicos del Conicet detectaron la mutación genética en diversas regiones del norte argentino, como Orán, Tartagal, Clorinda y Puerto Iguazú. Durante los estudios, los mosquitos expuestos a dosis de insecticidas que normalmente serían letales mostraron una alta supervivencia, confirmando una resistencia significativa.
Búsqueda de alternativas más eficaces
Ante este desafío, los investigadores han explorado nuevas alternativas para controlar la población de Aedes aegypti. Han identificado el pirimifosmetil, un insecticida organofosforado, como una opción prometedora. En los ensayos, este compuesto mostró un 100% de eficacia en la eliminación de los mosquitos resistentes a los piretroides.
Laura Harburguer, directora del estudio, subraya que no se debe depender únicamente de los insecticidas para controlar el dengue. Es necesario un enfoque integral que incluya la eliminación de criaderos, el uso de repelentes, y la participación comunitaria en la lucha contra el mosquito vector. La implementación de nuevas estrategias, como el uso de pirimifosmetil, podría ayudar a reducir el impacto del dengue en el país, pero siempre acompañado de un manejo integrado y coordinado del vector.
A medida que el Aedes aegypti desarrolla nuevas resistencias, es fundamental que las estrategias de control evolucionen para mantenerse efectivas. Los investigadores ya han presentado sus hallazgos al Ministerio de Defensa y de Salud, esperando que el pirimifosmetil sea aprobado como un nuevo recurso en la batalla contra este peligroso mosquito.
