Detrás de la Cámara con Leonardo Fagiano
El pasado sábado 23 de septiembre, el reconocido fotógrafo Leonardo Fagiano, junto a Lu Carusillo, presentaron su obra “Pieles Mutantes” en el marco de la noche de la fotografía
La cooperativa Granja de Ideas, se llenó de colores vibrantes y mensajes profundos. Se exhibieron las fotografías de la dupla Fagiano-Carusillo, en un salón que abrazaba el arte. Leonardo Fagiano es un artista versátil con habilidades en diversas disciplinas artísticas, incluyendo teatro, poesía, música, fotografía y arte digital. Actualmente, combina la fotografía con la creación digital y autorreferenciales artísticos. Además es creador del espacio Fotón “Taller de ideas” donde se dedica a la docencia. Ha recibido diversos premios nacionales en fotografías y es un promotor incansable de movidas culturales en la ciudad. Su compañera Lucía Carusillo, realiza el arte del body paint, es tatuadora en colibri tattoo y dirige el instituto cultural Nijinski.
Detrás del recuadro de “Momo”, una historia capturada en fragmentos, se encuentra una de las miradas que le dio vida. Leonardo Fagiano, con su ímpetu y tranquilidad, cuenta detalles de sus trabajos.
-¿Cómo surge la idea de “pieles mutantes”?
– Es una idea que tenemos con Lu Carusillo, que es la otra integrante de de este dúo que cada tanto nos juntamos a jugar y decidimos plantear temas que están ligados a la educación pública, el carnaval, el 8 m que es el día de la mujer, y como Lu es maquilladora profesional hace esa producción para las fotos.
Su mirada, se pierde entre sus obras y pareciera recordar el momento exacto en que fueron producidas.
-¿Cuál es la importancia de la fotografía?
– El objetivo es movilizar, el arte es el que toma las cosas difíciles que ocurren y las transforma en bellas. No quiere decir que sea bello, algo que te quede incómodo. En realidad, el arte lo que hace es movilizar para generar conciencia y poder movilizar a la gente.
-Además, ¿por qué elegiste esta profesión?
-El tema de la fotografía me pegó más porque soy docente de fotografía, y es lo más constante que tengo en mi vida. Me ha permitido vivir de esto. Además, soy artista visual, y es algo que me apasiona ya que el arte me permite encontrarme.
– Por último, ¿se puede vivir de este arte?
– Se puede vivir de la docencia del arte. No sé si puede vivir del arte, no en Río Cuarto. Por ejemplo, hay muy poca venta de obras en la ciudad y no se vende mucho. Pero la docencia es algo que siempre está.
Llegamos al final, y como todo artista, nos deja una marca de sus más profundas sensaciones. De esta manera, se adentra discretamente por el salón, entre bebidas, música y fotografías, que aún esperan ser descubiertas por aquellos amantes del arte.
